El baño en el Mar Muerto es algo anecdótico y divertido los primeros 10 minutos.
Una verdadera delicia para los sentidos, el disfrutar de los corales que esconde el Mar Rojo y la innumerable cantidad de vida que hay ahí abajo.
La llegada a Aqaba fue memorable, no hay palabras para describir el hotel, solo os diré que nos lo han enseñado en un carrito de golf.
En la Tumba de Aaron, mires a donde mires las vistas son sobrecogedoras, kilómetros y kilómetros de formaciones rocosas de las más diversas formas, y un color predominante, el rojo de la roca de Petra.
Petra, detrás de esta construcción, aunque técnicamente no lo sea, se esconde una ciudad entera tallada en la rojiza roca del desfiladero de Petra.
Bueno, lo prometido es deuda, por fin tenemos acceso a internet y veremos si consigo resumir estos primeros días de viaje. Aterrizamos en Amman sobre las 22:00 de la noche (hora local), allí nos esperaba, con un cartel equivocado, pero nos esperaba nuestro contacto aquí. Nos presentó a Salah, un tipo de aspecto rudo, pero con una sonrisa peculiar,.. intercambiamos…